Qutub minar es un estupendo minarete o torre de 73 metros, toda hecha de piedra de arena y mármol, mezcla de estilos bla bla, di-vi-na. Unos cuantos metros a su lado, esta Alai minar: allá por el 1300, al rey Ala-ud-din (y su lampara, piensa uno) tuvo la macanuda idea de hacer otro minarete igual de lindo, pero el doble de grande, porque el era el mas kapanga de todos los reyes. Bueno, para cuando se habían construido 27 metros de morondanga, Ala-ud-din dejo el mundo de los vivos y a ninguno de sus sucesores le parecio un proyecto digno de completarse. Y ahí esta ese muñón de torre, como permanente monumento a la ambición estúpida.
En el mismo terreno pero mas hacia la derecha hay un pilar de acero de 7 metros, un acero de tan buena calidad y pureza que 2000 años vienen pasando y ni rastro de oxido (parece que los científicos no se explican como lo lograron con la técnica de aquel tiempo... seguro alguno ya mete a los marcianos) con inscripciones en sánscrito.
Se dice que si uno puede apoyarse de espaldas sobre el pilar y rodearlo con sus brazos hasta tocar sus dedos, todos sus deseos se cumplirán, lo cual no es poca cosa en un país donde la mayoría tiene hasta sus deseos mas elementales claramente insatisfechos.
Naturalmente el pilar esta protegido por una reja, no vaya a ser que.
martes, 30 de junio de 2009
Delhi dia 3 parte 2
Publicado por Ezequiel a las 2:59
Etiquetas: Crónicas de viaje, India
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