En las autobahn (autopistas) alemanas no hay limite de velocidad, se deja al criterio y responsabilidad del conductor. Pero en lugar de señales de tránsito con numeros, hay unos vistosos carteles con fotos y nombres de la personas (generalmente familias completas) que en esa curva o en esta recta aceleraron de más y ya no están entre nosotros. Brrrrr. Y este tipo a 240km/h (es literal) hablando por teléfono como si estuviera manejando un karting.
lunes, 30 de junio de 2008
Schumacher, acordate de Senna
Publicado por Ezequiel a las 20:43
Etiquetas: Crónicas de viaje
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1 personas opinaron sin que les pregunten:
me recuerda la canción de kraftwerk, donde unos robotitos entonan cual coro de niños cantores de viena:
"the fun fun fun of the autobahn..."
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