jueves, 26 de junio de 2008

Auschwitz

No hay demasiado para ver acá. Por lo que se ve,

Si no sabemos, la leyenda en la puerta, Arbeit Mach Frei, (el trabajo os hará libres) no es mas que el slogan de un sindicato cualquiera, un poco hipócrita eso sí porque no hay registro de que un solo obrero de este gremio haya sido jamás liberado por sus eficiencia en las tareas

Si no sabemos no dicen nada ese montón de fotos viejas de gente de las que ni siquiera sabemos el nombre, son iguales a las que uno puede encontrar tiradas en la calle o en el armario del abuelo

Si no sabemos no impresiona la extensión de este lugar. Puede que haya sido uno de los más bonitos campings de toda la Europa Central, lleno, llenísimo en su día de turistas.

Si no sabemos no tiene porque impresionar esa larguísima cerca eléctrica, puede que estuviera ahí para contener rebaños de vacas. Enormes, gigantescos rebaños vacas venidas de todas partes de Europa antes de ser sacrificadas

Si no sabemos no tienen nada de malo esos postes con ganchos, quizás ahí colgaban carne a secar.

Si no sabemos no se hace un nudo en el estómago, pues esa hilera de jaulas puede haber sido una gran perrera. Claro que en esas jaulas, apenas si podría estar un perro, pobrecito.

Si no sabemos, no hay por qué preguntarse de lo que es capaz el ser humano, pues esas barracas podrían haber alojado boy’scouts. Quizás en su mejor momento llegó a haber 100.000 boy scouts, una ciudad completa, cómodamente alojados dentro de esas barracas, algunas con letrinas en suite

Si no sabemos, no tiene mayor significado esa pila de valijas vacías y rotas, con nombres de personas y ciudades escritos (Rosemberg-Berlin, Perlman-Lodz, Edelstein-Budapest, incluso Kafka-Praha), sólo puede estar ahí a la espera de dueños que probablemente ya las olvidaron, o que las abandonaron por inservibles

Si no sabemos no hay nada de especial en esas vías, quizás eran parte de una gigantesca red de comunicaciones de Krakow, que traía miles de viajeros, eso sí cómodamente sentados en cada formación pues los viajes duraban a veces semanas

Si no sabemos no hay razones para llorar delante de esa pila de zapatos o de anteojos viejos, podría ser una gigantesca feria americana.

Si no sabemos no hay razones para que nos sea imposible mirar hacia esos hornos, podrían ser los hornos de una fábrica de tortas de chocolate, la mayor y más eficiente fábrica de tortas de chocolate que ha conocido la humanidad, con una producción que llegó a ser de casi 10.000 tortas por día! Por épocas, había tal demanda de tortas que apenas bajados del tren los ingredientes, los ponían a cocinar!

Si no sabemos no se nos tiene por qué retorcer el alma al ver esa montaña, esas toneladas de pelo humano apenas desteñido, quizás la gente se lo haya vendido a una fábrica de pelucas. Y esas alfombras pueden estar hechas con pelo de cualquier animalito del bosque, o incluso podrían ser de material sintético

Pero sabemos. Por eso.

3 personas opinaron sin que les pregunten:

p dijo...

la verdad nos hará libres?
(al menos, debería hacernos conscientes)

y edipo se arranca los ojos.

Evelyn Spalding dijo...

por qué no escribís más en vez de vender peluches?

estejulioesuno dijo...

cuando lo leo en los diarios no me llega como me llegó tu escrito.